Gloria Guida y las calientapollas

Ayer, tras mi entrada sobre los Mitos de las Películas Porno, me entró el gusanillo y comencé a navegar por la red, de artículo en articulo sobre famosas actrices porno. Para mi inmensa alegría llegué a uno que hablaba de los mayores iconos del cine erótico de los 70, y entre estas musas del erotismo hubo una que llamó especialmente mi atención.

La Hermosa Gloria Guida

Gloria Guida, la actriz Italiana con cara de niña buena, y que fue la protagonista de buena parte de mis fantasías eróticas de la adolescencia. No sabía como se llamaba hasta ayer, sólo recordaba lo mucho que me gustaban sus películas, normalmente emitidas por Telecinco a altas horas de la noche. Películas de esas que en casa llamábamos de Jaimito aunque el protagonista no fuera el famoso personaje de Jaimito, nosotros llamábamos así a cualquier filme en el que participara el famoso Alvaro Vitali.

Cuando los coños tenían pelo

En fin, entre todas las películas de la época había una que me gustó especialmente, La Colegiala. Gloria Guida interpretaba a una hermosa joven que se dedicaba a ir provocando a diestro y siniestro, se abría de piernas para enseñarle las bragas a su profesor, se abría de piernas para restregarse contra el novio cuando la llevaba en la moto... Para la mente calenturienta de un adolescente pre internet, esas visiones de sus braguitas, de su coñito... bueno, bastaban para hacer que la leche casi llegara al techo. Madre mia, la de pajas que me hice con ella...Era erotismo muy soft, ya os digo, un poco de piernas, unas braguitas, a veces se desnudaba, pero nunca había sexo explícito, era lo que se llamaba Cine S. Pero la verdad es que me encantaba, y me encanta, ya que he estado buscando sus películas de nuevo, y joder, me siguen poniendo como una moto.

Escena lésbica con Lilli Carati

Se puede ver su películas casi completa en youtube, y digo casi ya que debido a la estúpida censura de youtube están cortadas las escenas de desnudos, aún así os podéis hacer una buena idea de esta diosa del celuloie, una belleza sin par, y, probablemente la mayor calienta pollas que haya existido nunca.

Enseñando las bragas al profe en la Colegiala

 Que digo calientapollas, habría que inventar una nueva palabra para definírla, ya que era algo de proporciones paracósmicas, multiuniversales, Eternas. Esta chica representaba la esencia de todas las calientapollas con las que nos hemos cruzado en nuestra vida.

Auténticas zorras de corazón y entrepierna que te provocaban, se te restregaban, a veces hasta llegar a meterte casi las tetas en la boca, pero que cuando intentabas ir mas allá te soltaban un corte, un "que te has creído". Pues coño, que me voy a creer, que llevas media hora enseñándome las bragas y me has puesto como una moto, y por favor, no me digas que no te has dado cuenta, como tampoco, imagino, te has dado cuenta de que se te ve todo el canalillo, así que no te hagas la sorprendida.

Gloria y sus perfectas tetas

Cuantos restregones en la adolescencia para acabar con un tremendo dolor de huevos por que ella "no era de esas", ¿de esas de que? ¿De las que follan? ¿De las que no son unas zorras calientapollas?

Pero os voy a decir una cosa... me gustan las calientapollas, con los años he aprendido a apreciarlas, a disfrutar su juego, a divertirme con ellas. Si, a ellas les gusta calentar... y a mi que me calienten.
Sin estas hermosas y atrevidas chicas mis pajas adolescentes hubieran sido mucho mas tristes, mas vacías, mas secas...igual de abundantes en número sin duda, pero mucho menos excitantes.

Os lo digo chicas, os quiero, a cada una que me ha enseñado el canalillo, a cada una que ha mostrado sus bragas, y por supuesto os quiero a cada una a la que he tocado una teta, el culo, o con la que sencillamente me he rozado un poco mas de la cuenta.

Que sepais que os quiero y que aprecio todo lo que valeís y todo lo que habéis hecho por nosotros, por mi. Si, vale, también algunas os podríais haber estirado mas, que una mamada no es sexo según Clinton, pero bueno, ya no me quejo. Como os digo, al final aunque fuera en mi imaginación hemos follado, y algo es algo... no¿?

Por eso mi humilde tributo a Gloria Guida y a todas las calientapollas a las que ella con tanto amor, gusto y encanto ha representado durante todos estos años.

Calentandopollas en el bus

Y por cierto, que a sus 57 años me la sigo follando sin dudar.