Y decimos adiós al mundial. Hay veces en las que las cosas no salen como queremos, no importa lo mucho que lo intentemos, lo duro que probemos o cuanto nos esforcemos, sencillamente hay días en los que es mejor no haberse levantado de la cama.
Nos han arrasado, triturado, humillado, por una vez que de verdad nos creíamos los fuertes... nos vapulean, ayer le dijimos adiós a una época de victorias. Seis años ininterrumpidos de victorias y alegrías futbolísticas que a algunos les servía para olvidarse durante unos minutos de las derrotas y las penas de la vida real. Siendo sinceros no le tengo especial cariño a un atajo de multimillonarios en pantalones cortos cuyos mayores talentos son darle patadas a un balón, pero cualquier cosa que sirva para unirnos, pues bienvenida sea.
Respecto a los que se alegran de la derrota de España - siendo ellos españoles - pues solo decirles que son un atajo de soplapollas y que aunque no te guste el futbol, aunque creas que forma parte del "pan y circo", aunque vayas de radical de la hostia y tal, pegarse un tiro en el pie es de ser un autentico cazurro, un cateto.
En fin, La Roja dice adiós a una época al mismo tiempo que España, esta España querida, esta España nuestra "parece" que van remontando de la Crisis poco a poco, tímidamente, no sea que le vuelvan a pegar un tiro al asomar la jeta del pozo negro en que estábamos sumergidos.
Se acabo el Mundial, puede que pasen años, décadas, antes de que otro equipo Español vuelva a darnos las alegrías y la emoción que nos han dado estos que se van.
Enga, que solo quedan 4 años para desquitarnos.